Una obra artística habitable
Nos embarcamos en el Museo Anahuacalli en Ciudad de México, una impresionante obra arquitectónica concebida por el artista Diego Rivera para albergar su colección de figuras prehispánicas.
El propio edificio envuelve al visitante a lo largo de sus cuatro pisos en un recorrido donde se representan las divinidades que marcaron la cultura prehispánica. Llama la atención cómo el espacio se concibió para que dialogaran las piezas que se exhiben con la divinidad que representan: la diosa del maíz, la de la tierra, el dios del viento o el dios de la lluvia.
Además, la visita a Anahuacalli no se limita al pasado. El museo introduce estratégicamente piezas que permiten poner en relación a los milenarios objetos con el arte contemporáneo.
Rivera buscaba con este museo “generar una continuidad entre el arte moderno y la estética precolombina”. Sin duda, 60 años más tarde, su ambición sigue sintiéndose entre quienes lo visitan.